TÚNEZ, UN PAÍS QUE VIVIR Y DISFRUTAR CON LOS CINCO SENTIDOS - UNA AVENTURA Lo bueno, es que tiene todo lo que podais desear... así que tanto si vais en pareja o en grupo, todas podrán disfrutar al máximo de sus muchos y bellos encantos: ruinas, mezquitas, zocos, mar, desierto, montañas, pueblecitos y lujo de jeques. |
DESCUBRIENDO TÚNEZ EN GRUPO PRIVADO DE MUJERES CON GUÍA Y CONDUCTOR EN 4X4 Lo primero que llama la atención de nuestros sentidos es la luz cegadora del sol, una luz tan increible que hace que hasta un día nublado brille de manera especial, después cuando os empiezais a adentrar en sus pueblos y en sus gentes, descubres el color azul verdoso del mar, el azul celeste de las puertas de las casas o el azul intenso del cielo, el dorado de la arena, de los dátiles, del té... El segundo sentido en reaccionar es el oído con la llamada a la oración desde cualquier mezquita, con las olas del mar si estais cerca de la playa, con el canto de los gallos al amanecer, con la mezcolanza de idiomas, ya que no sólo escuchareis el árabe sino el francés o el italiano e incluso el español por doquier, en contraste, el sonido del silencio en el desierto donde las estrellas os embriagarán y sereis incapaces de escuchar voz alguna. Al tomar contacto con las especialidades gastronómicas del país, vuestro paladar se dejará arrastrar por un torrente de sabores y una simple ensalada os sabrá completamente diferente, el brik, el cous cous, el tajine, la harissa, la ensalada mechouia, los dulces y por supuesto mi sabor favorito: el té con menta en uno de los cientos de cafés que encontrareis cada pocos metros y a los que no acuden las mujeres del pueblo. Parad en todos los que podais y pedid un té y fumad una sisha de manzana. Cuando visiteis los zocos os impregnareis de todo tipo de olores, a cuero, especias, esencias, etc. Aquí es donde las compradoras compulsivas se dejarán arrastrar y podrán tener problemas con el sobrepeso del equipaje a la vuelta. Un consejo: llevad la maleta medio vacía al inicio del viaje. Por último, mi preferido, el sentido del tacto. Tocar la historia de miles de años a través de las piedras, las teselas de los mosaicos, qutarme los zapatos y andar descalza por la arena de desierto, acariciar el pelo suave de un camello, tumbarme en el desierto de sal, introducir las manos en el agua de un oasis de montaña, ponerme una chilaba y coger mi cámara para intentar captar un trocito de todos esos momentos y traerlos conmigo como el más maravilloso de los recuerdos porque un país se vive, no se visita !! Desde aquí os animo a todas a hacer un viaje diferente, a olvidar todo aquello a lo que estamos acostumbradas en nuestro día a día y a dejarse llevar por el mundo de los sentidos en grupo Les. Fotos y Texto de Concha: Viajera - www.lesbianasviajeras.com -
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